Motoko tiene su primer trabajo en busca de un espíritu maligno, pero desafortunadamente, todos los chicos estaban en la isla donde fue encomendada. Luego de exterminar al espíritu, poseyó a Naru, forzando a Motoko a aprender una técnica que le enseñó su hermana cuando era niña. Al final, Naru y Keitaro terminan peleados debido a que ella pensó que Keitaro se aprovecharía de la situación de debilidad.