Tsukasa le pide una cita a Tsukushi, aunque al principio no lo escucha. Como tal, está confundida y llega varias horas tarde. Ella se ofrece a invitarlo a tomar té y los dos quedan atrapados en un ascensor. Cuando Tsukasa tiene mucha fiebre, Tsukushi lo cuida a pesar de que aún no le gusta.