Timo es un reputado concertista de piano que ha naufragado en su vida personal. Un día se encuentra a la puerta de su casa a un hombre mayor que él de aspecto un tanto desastrado. El hombre, que se llama Leo, resulta ser su padre, quien abandonó el país cuando Timo tenía tan sólo tres años y ha pasado los últimos 35 en paradero desconocido. Leo es un eterno embaucador de talante optimista que tuvo que abandonar su patria tras meterse en notables embrollos. Ahora ha vuelto para entregar a su hijo un misterioso legado y para responder preguntas acerca de su pasado. Padre e hijo se embarcan en un viaje por carretera rumbo al norte del país. Lo que empieza como un choque de caracteres que resulta gracioso y pintoresco termina siendo una auténtica revelación emocional mientras los dos protagonistas se ayudan a asimilar sus respectivos fracasos.